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Desayuno Coloquio: «Economistas, políticos y otros animales» Como acabar con las políticas que frenan nuestro progreso

Desayuno Coloquio Miguel Ángel Fernández Ordoñez
Desayuno Coloquio Miguel Ángel Fernández Ordoñez

La Fundación Cámara de Comercio de Sevilla y el OEA han celebrado, un desayuno-coloquio en el que ha participado el Ex Gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordoñez, que ha ofrecido una conferencia bajo el título  “Economistas, políticos y otros animales. Cómo acabar con las políticas que frenan el progreso” y que fue presentado por  Francisco Ferraro García, Presidente del Observatorio Económico de Andalucía.

El ex gobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez cree que el Banco Central Europeo «está haciendo todo lo que puede, teniendo en cuenta el actual contexto económico. «Se está llegando al límite en política monetaria, desde el punto de vista monetario no podemos hacer más, son otros los que tienen que hacer».

Se ha referido así, a las últimas medidas anunciadas por el presidente del BCE, Mario Draghi, dirigidas a reactivar la economía de la eurozona y facilitar el cumplimiento de su objetivo de estabilidad de precios.

Además, el Ex gobernador del Banco de España ha puesto el punto de mira en otras «dos patas» al margen de la política monetaria donde tomar medias.  La política fiscal, que “en Europa, sin Tesoro público, no funciona», y «hacer política fiscal a nivel nacional, de aumento de déficit en países como España. Es un disparate, porque lo único que se hace así es aumentar la deuda, sin olvidarnos de las reformas estructurales, que van con una lentitud enorme».

Así, ha indicado que en España, desde el año 2010, tanto por parte del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero como por el del ‘popular’ Mariano Rajoy se han llevado a cabo reformas estructurales en materias como el gasto, las pensiones o el mercado laboral, y actualmente en otros países europeos «se está haciendo algo, pero todos con una lentitud enorme».

Según Fernández Ordóñez, el BCE «puede hacer dos cosas», una que es «decir que la política monetaria no basta, pero no le hacen ni caso», y otra que, «para no me digan que no he hecho todo lo posible, hacer todo lo posible», y eso es lo que, en su opinión, está realizando el organismo que dirige Mario Draghi.

Fernández Ordóñez, ha anotado que le preocupa que no sabe «si valdrá o no lo que está haciendo el BCE, que está haciendo todo lo que puede. Pero, ha insistido, «desde el punto de vista monetario no se debería hacer más porque los rendimientos son decrecientes, y los tipos de interés negativo se pueden sostener durante un periodo corto de tiempo”.

Por otra parte, Fernández Ordóñez no cree que «la economía mundial esté en una situación preocupante, aunque reconoce elementos para preocuparse, ante la situación económica en países como China”.

Además ha indicado que «la crisis que ha tenido el mundo, y España en particular, ha sido de endeudamiento, no de pérdida de competitividad, y esas crisis son de salidas muy lentas. “Salir del endeudamiento es muy complicado. La deuda se acumula y hay que devolverla”. Para salir de esta situación la mejor combinación de políticas son la unión de “políticas monetarias laxas, una mayor política fiscal en un primer momento aumentando la inversión pública, lo que tendría efectos beneficiosos en algunos países, y aplicar reformas estructurales, que son las que de alguna forma permiten que la productividad aumente”.
Finalmente, el Ex Gobernador del Banco de España, ha hablado sobre su libro donde cuenta el retraso de España con respecto a otros países por falta de liberalismo y pragmatismo, pero, sobretodo, por falta de ilustración. “En España las políticas se elaboran de forma poco ilustradas”. “Nuestro parlamento es ignorado, no se debaten los temas y no se conoce. Hay muchas normas que se hacen con urgencia, mediante Decretos Ley, pero que no tienen calidad, por lo que esto crea inseguridad jurídica”. “Así aboga por crear instituciones independientes como hacen otros países, pero que realmente sean independientes. “En España estas instituciones, los llamados órganos regulatorios,  acaban siendo politizadas o manipuladas”.