Cataluña, Canarias, Baleares, Andalucía y Valencia, comunidades que concentran el 93 % del turismo extranjero en España, han perdido peso en la economía española en los últimos dieciocho años.
Estos datos los ha dado a conocer el presidente del Observatorio Económico de Andalucía, Francisco Ferraro, durante la presentación de un informe económico, aunque forman parte análisis que ha realizado sobre el impacto del sector turístico en la economía.
La explicación a ese retroceso es que el sector turístico es una industria que no genera el mismo valor añadido que otras y, además, es estacional y la mano de obra no es cualificada.
A esto se añade que está conformado por un conjunto de actividades en un mercado muy competitivo y, por tanto, los precios se ajustan a la baja y eso limita la posibilidades de inversión.
Por tanto, se trata de un sector poco intensivo en capital y tecnología y los trabajadores son poco cualificados, con lo que las rentas son bajas y se une que no trabajan todo el año y las complementan con subsidios o trabajos temporales.
Al turismo "nos hemos agarrado como a un clavo ardiendo y, aunque probablemente no nos quememos completamente, iremos tirando por la vida", ha ejemplificado Ferraro el impacto del turismo en la economía.
Ha aclarado que respeta al sector turístico como cualquier otro, pero ha precisado que no es lo mismo que se cree un bar que una empresa aeronáutica o informática porque supone más rentas y más valor añadido.